Toxocara canis y Toxocara cati son las más comunes.
Hoy en día los animales de compañía se han transformado en protagonistas de la vida familiar. Son interminables los beneficios traen , pero esta tendencia ha desencadenado otro proceso en forma paralela que en algunas ocasiones no es bien entendido que es la tenencia responsable de las mascotas.
Existe una industria que busca dar respuesta a esta realidad, donde incluso existen hoteles para mascotas. Sin embargo, es importante que los dueños no olviden que los animales de compañía pueden ser portadores de diferentes enfermedades infecciosas entre las que se encuentran las causadas por parásitos, y es transcendental informarse sobre las infecciones que podrían transmitir y cómo evitar su contagio.
El Instituto de Salud Pública de Chile (ISP)a través de la sección Parasitología del Departamento Laboratorio Biomédico ha detectado por medio de exámenes, una enfermedad parasitaria que se trasmite de forma frecuente, llamada Toxocariasis. Ésta corresponde a una infección causada por un gusano redondo que pueden vivir en el intestino de perros y gatos donde se desarrollaran hasta adultos para eliminar huevos en conjunto con las deposiciones.
Toxocara canis (perro) y Toxocara cati (gato) son los nombres de las dos especies involucradas. El ser humano se contagia por el consumo de huevos, a través del contacto directo con las deposiciones de animales infectados que podrían haber estado en plazas públicas y jardines. Muchas veces los perros y gatos defecan, luego estas deposiciones no son percibidas, ya que han sido dispersas por el riego en lugares públicos y/o privados. Una vez ingeridos los huevos se desarrollan hasta liberar sus larvas que migran atravesando el intestino y se pueden alojar en diferentes tejidos causando cuadros clínicos diversos.
Otra opción de contagio, es el contacto directo con el animal, porque tienen por costumbre lamerse como una forma de asearse. De esta forma esparcen por su pelaje los huevos que son microscópicos. Por otro lado, la infección también puede ocurrir al consumir alimentos, sobre todo vegetales que crecen a ras de suelo y agua contaminada con los huevos.
Las manifestaciones clínicas son variadas y dependen de los órganos afectados, pero un gran número de estas expresiones se relaciona con cuadros respiratorios similares al asma, causados por el cruce de la larva a través de los pulmones pudiendo llegar a ubicarse en distintos órganos llegando incluso pudiendo afectar la visión si llegan al ojo.
Es por esto que, al momento de realizar un diagnóstico médico, el profesional de la salud debe preguntar si el paciente convive con una mascota y no descartar que se trate de este tipo de enfermedades de carácter zoonóticas (ciclo de transmisión donde participan animales y humanos).
Recomendaciones para prevenir este tipo de infecciones:
- Recoger las deposiciones de los perros y gatos protegiéndose las manos con un guante, con el fin de eliminar las fecas de forma segura para que no se dispersen.
- Lavarse muy bien las manos siempre que se este contacto con mascotas, aunque estas estén con sus controles sanitarios al día.
- La responsabilidad con las mascotas, incluye consulta veterinaria y administración de antiparasitarios. Este control si se realiza en forma regular, disminuye considerablemente la exposición al riesgo de contraer esta infección parasitaria.
Detección de parásitos en adultos
Los análisis de laboratorio, entregados por la sección de Parasitología del ISP, demuestran que esta enfermedad zoonótica los últimos años sube en rango de edad.
Porcentaje menores de 15 años con serología para Toxocariasis positiva en Chile entre los años 2011 y 2023.
Porcentaje de muestras con serología postiva por Toxocariasis Chile entre los años 2011 y 2023 en dos grupos etarios.