Instituto de Salud Pública

En virtud de la alerta emitida el día 28 de septiembre, respecto al retiro de mercado de una serie de productos farmacéuticos del laboratorio Sanderson, tras una evaluación realizada por funcionarios de la Agencia Nacional de Medicamentos (ANAMED), durante la tarde de este viernes 29 de septiembre, se ha instruido el levantamiento de las restricciones de fabricación y distribución de aquellos productos hemoconcentrados.

Asimismo, se comunica que, en coordinación con el Ministerio de Salud, se ha determinado que se mantiene la restricción de uso sólo para el producto farmacéutico Cloruro de Sodio al 0,9%, en envase primario de plástico desde 500 mL, independiente de su fecha de fabricación. 

Por lo tanto, están liberados todos los productos, ya sea en envase de plástico o vidrio (a excepción del Cloruro de Sodio al 0,9%, en envase primario de plástico desde 500 mL independiente a su fecha de fabricación)

Es importante indicar que las medidas sanitarias, por su naturaleza, son transitorias y se evalúan constantemente. Por la misma razón, hemos solicitado a los servicios de salud mantener atención a las instrucciones y acciones que han sido sistematizadas en conjunto con el Ministerio de Salud y CENABAST e informado a la red, con el fin de mitigar la posible afectación de los servicios, por lo que no debiera haber inconvenientes en el funcionamiento en la red de salud pública.

Al respecto, el director del ISP, Rubén Verdugo, señaló “las medidas se toman priorizando la salud de las personas y esto lo podemos hacer gracias a los canales de retroalimentación que mantenemos a diario con los establecimientos y los profesionales de la salud tanto del sector público como privado, lo que nos lleva, en algunos casos, como es este brote de Burkholderia, a reevaluar o ajustar las medidas, de manera de poder garantizar la seguridad de los ciudadanos a través de la vigilancia rigurosa de los productos médicos y al mismo tiempo velar por el funcionamiento de los establecimientos de salud”.

El rol de vigilancia y control de productos que realiza el ISP mandata a la institución a asegurar la calidad e inocuidad de los productos, esto significa mayores exigencias a la industria farmacéutica, siempre en línea con la continuidad de las prestaciones, elementos que son importantes y vitales para el bienestar de los pacientes.