El Instituto de Salud Pública de Chile (ISP) hace un llamado a la ciudadanía a conservar los medicamentos en su envase original, protegiéndolos de la luz y humedad, a no más de 25°C. Asimismo, hay que verificar que, al comprar los productos farmacéuticos en la modalidad online estos establecimientos farmacéuticos estén inscritos en el ISP para que el producto, al momento de ser despachado, mantenga la cadena de temperatura.

Los productos farmacéuticos, pueden perder eficacia y calidad si son sometidos a diferentes temperaturas. El ISP, mantiene un registro de farmacias que cuentan con esta modalidad de “delivery” adecuado para despachar los medicamentos que son adquiridos por Internet. Revisa AQUÍ las farmacias autorizadas por el ISP para el comercio electrónico.

Jorge Canales, jefe del Departamento Agencia Nacional de Medicamentos (ANAMED) del ISP, señala la importancia de esta medida “la adquisición de productos farmacéuticos o protectores solares, en lugares sin autorización sanitaria, como por ejemplo en ferias o en la calle donde no se respetan las condiciones de almacenamiento y dispensación, implica que no existe garantía de su correcta conservación. Por lo tanto, estos productos pueden no producir el efecto deseado e incluso provocar reacciones adversas, debido a que algunos de sus componentes degradados pueden ser dañinos”.

Agregando que “el ISP como autoridad sanitaria, tiene la responsabilidad de estar siempre informando sobre el correcto uso y conservación de los medicamentos y protectores solares. Asimismo, insistir en que las personas consulten a un médico antes de recurrir a un producto farmacéutico respetando siempre las dosis y horarios de los medicamentos indicados por el especialista”.

Para el almacenamiento de los medicamentos y protectores solares en casa, se recomienda:

–Guardarlos en un botiquín o recipiente hermético.

–Conservarlos en el envase original junto con el folleto al paciente. En este documento la persona se puede informar si su medicamento requiere ser conservado en el refrigerador, es decir entre 2° C y 8°C, como es el caso de algunos antibióticos, así como también la insulina.

–Revisar periódicamente el botiquín y retirar fármacos vencidos, o que hayan perdido su color y forma original.

–No almacenar medicamentos de tratamientos anteriores.

-No exponerlos al sol.

-Mantenerlos en un lugar fuera del alcance de los niños para evitar intoxicaciones.